En una ocasión especial en la que se cumplen 30 años del fallecimiento de la icónica actriz Audrey Hepburn, tuve el privilegio de vivir una experiencia inolvidable en el mundo de la radio.
Como cada rutinario miércoles, me encontraba en mi estudio de realización, y como cada rutinario miércoles, mi compañero y amigo, Nicolás Sierra, me dio un papel con el nombre de la persona que íbamos a entrevistar y su número de teléfono. Esta vez me sorprendió porque íbamos a contactar con Italia.
Al otro lado de la línea telefónica, una voz amable y distinguida hablaba en un español con acento italiano, su nombre era Sean. Nicolás me dijo anteriormente, vamos hablar sobre Audrey Hepburn. Me dije a mi mismo, ¿la actriz no era italiana? ¿llamaremos a un experto?, ¿quizás al autor de una de sus biografías?
Cuando contacté con Sean y lo puse en línea interna en contacto con Nicolás, me sorprendió muchísimo que hablaban muy amigablemente. Sus tonos de voz invitaban a que se conocían de años. El tal Sean había venido mucho a Sevilla. Rápidamente miré en Internet a ver quién era, ese tal Sean Ferrer… Mi corazón comenzó a latir con una mezcla de emoción y asombro porque era Sean Hepburn Ferrer, el hijo de Audrey Hepburn y el también actor Mel Ferrer, con quien minutos antes me había comunicado personalmente.
La conversación con Sean fue una experiencia única. A través de las ondas de radio, pude sentir durante su entrevista con Nicolás su cálida personalidad y su amor por su madre.
Habló en otras cosas sobre la importancia de conmemorar el aniversario del fallecimiento de su madre, 30 años. Y cómo su legado continúa inspirando a tantas personas en todo el mundo. Se habló sobre la increíble carrera de la actriz y su dedicación a causas humanitarias, así como, de los momentos inolvidables que compartió con ella.
La magia de la radio se hizo evidente cuando Sean compartía algunas anécdotas personales. Su infancia que tuvo con Audrey Hepburn y cómo ella siempre fue una madre amorosa y comprensiva. Sean mencionó que, a pesar de la fama y el reconocimiento de su madre en el mundo del cine, ella siempre mantuvo los pies en la tierra y se preocupó por transmitirle los valores de la empatía y la bondad a él y a su hermano, Luca. No atisbaba en sus palabras momentos de infelicidad, de abandono, como ocurre en mucho casos, de padres famosos que han truncado sin querer el devenir de sus hijos, en todos los aspectos de su vida.
Sean, también destacó la importancia de recordar a su madre no solo como una actriz talentosa también sobre su trabajo como embajadora de buena voluntad de UNICEF, y cómo su compromiso con los derechos de los niños, la convirtió en un verdadero icono global.
La experiencia de hablar con Sean Hepburn Ferrer a través de la radio, fue un recordatorio de la magia que este medio puede crear. A pesar de estar separados por miles de kilómetros, las ondas de radio nos unieron en un momento significativo, para honrar la memoria de Audrey Hepburn. Algo que nunca podría imaginar que ocurriese. Fue una experiencia que nunca olvidaré y que reforzó mi admiración por esta gran mujer y su legado perdurable.
A medida que el mundo celebra el trigésimo aniversario de la partida de Audrey Hepburn, su influencia sigue siendo tan poderosa como siempre. Su belleza, elegancia y dedicación a causas, continúan inspirando a personas de todas las generaciones. Gracias a la magia de la radio, pude conocer más de cerca a su hijo, Sean, y escuchar de primera mano las historias que atestiguan la grandeza de Audrey Hepburn como actriz y como ser humano.